Imagen tomada de: http://d.ibtimes.co.uk/en/full/1371352/russias-vladimir-putin-eyeing-closer-ties-north-koreas-kim-jong-un.jpg
Por
Danny Steven Rueda Gómez
La
economía Rusa no pasa por sus mejores tiempos, y los medios de comunicación nos
muestran un panorama cada vez más complicado para el país transcontinental
respecto a ello. La desvalorización del petróleo en los mercados
internacionales se ha constituido en la principal causa de la crisis económica
Rusa, que se encuentra al borde de la recesión. Pero eso no es todo, pues
además de la baja en los precios del petróleo, la perspectiva de iniciativas
comerciales rusas con las principales economías occidentales encuentra cada vez
más obstáculos, surgidos por las sanciones económicas que le han sido impuestas
desde el año pasado por parte de la Unión Europea y Estados Unidos. Sanciones que
tienen como principal objetivo limitar la financiación de la economía Rusa, como
consecuencia de la anexión de Crimea y del apoyo que Moscú ha prestado a los
rebeldes pro-rusos en el este de Ucrania.
Con
este difícil panorama económico, el presidente Vladimir Putin ha dirigido su
mirada hacia Asia en busca de socios comerciales, y es allí donde Rusia ha
visto allanado su camino para encontrar oportunidades de negocios, gracias a la
presencia de viejos conocidos como China, con quien espera incrementar
significativamente el comercio para este 2015. Pero con quien más ha
intensificado relaciones diplomáticas, y sobre todo económicas, es con Corea
del Norte.
Con
una economía que, como se dijo anteriormente, se encuentra cerca de la recesión,
y con casi nulas oportunidades de negocio en Europa y Estados Unidos debido a
las sanciones, Moscú ha recurrido a Pyongyang, al punto de que la Cámara de
Comercio de Rusia estableció a principios de febrero un Consejo especial para
la cooperación con Corea del Norte. El objetivo trazado es que el comercio
entre ambos países llegue a los 1,000 millones de dólares anuales para el año 2020
(El doble del valor actual).[1]
Los
principales puntos acordados tienen que ver con: facilidades en los movimientos
de capitales entre ambos países; y mayor acceso, en especial para Rusia, a
procesos productivos relacionados con materias primas. Por ejemplo, se ha
acordado que Moscú permita que las empresas norcoreanas abran cuentas en bancos
rusos, mientras que Rusia podrá tener acceso a las minas de Corea del Norte,[2] país rico en minerales, del cual se estima que el valor total de su riqueza
mineral es 24 veces superior a la de Corea del Sur.[3]
Según
informan los medios de comunicación, como parte de estos acuerdos comerciales,
Corea del Norte también se comprometió a facilitar su proceso de visado para
los empresarios rusos, quienes podrán usar Internet y telefonía móvil mientras
realicen viajes de negocios al Estado, lo cual es bastante curioso, si tenemos
en cuenta que dichas opciones tecnológicas son un lujo casi imposible de
obtener tanto para los habitantes de Corea del Norte como para los que van allí
de visita.
Con
ocasión de este acercamiento, meses atrás Rusia canceló parte de una deuda que
Corea del Norte tenía con ese país desde la época de la Unión Soviética,
calculada en 11,000 millones de dólares, de los cuales fueron condonados unos 8
mil millones de dólares, aunque eso no fue una decisión tan liberal por parte
de Rusia, pues a cambio de eso se le facilitó el acceso a recursos minerales de
Corea del Norte, como se dijo anteriormente. Respecto a estos acuerdos
comerciales los dos países acordaron comerciar exclusivamente en rublos.[4]
No
obstante, estos acuerdos comerciales no nos muestran una relación novedosa
entre Moscú y Pyongyang, pues ambas partes han tenido históricamente buenas
relaciones comerciales y acuerdos, especialmente de ayuda económica por parte
de Rusia hacia Corea del Norte. Además, es importante recordar que Rusia es uno
de los principales destinos de las importaciones que llegan al país Norcoreano.
Finalmente,
como parte de ese estrechamiento de relaciones entre los dos países, en lo que
tiene que ver con asuntos diplomáticos, se ha conocido que Vladimir Putin
recibirá al líder norcoreano Kim Jong-un en las ceremonias conmemorativas del
70 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, y que Rusia estaría
buscando impulsar su plan de extender, a través de Corea del Norte, el tren transiberiano
hasta Corea del Sur.[5]
Será
interesante conocer la postura que toman Estados Unidos y la Unión Europea
frente a esta renovada relación entre Rusia y Corea del Norte, en especial en
momentos de tensión como los que se viven actualmente con el conflicto
Ruso-Ucraniano, en el cual occidente viene intentando mediar para lograr una
pronta solución pacífica. Y es que aunque económicamente hablando Rusia se haya
debilitado, no lo ha hecho política y sobre todo militarmente, más aun cuando
esa nación sigue fortaleciendo sus relaciones con “viejos conocidos” como los
referenciados en este escrito.
[1] KOTTASOVA, Ivana. Las minas de Corea del Norte atraen la
amistad de Rusia. Recuperado el 11 de febrero de 2015, de
http://www.cnnexpansion.com/economia/2015/02/05/rusia-y-corea-del-norte-los-nuevos-mejores-amigos
[2] Ibídem.
[3] TAKAYAMA, Hideko. Los Tesoros de Corea Del Norte. Diario El País de
España. Recuperado el 11 de febrero de 2015, de http://elpais.com/diario/2008/01/06/negocio/1199627544_850215.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario