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Acuerdos
regionales de interés para Colombia - La Alianza del Pacífico
Yedery Anderleth Silva
Delgado*
La conformación de grupos regionales de integración
económica obedece a fenómenos como la globalización y la liberalización del
comercio. Así, la Alianza del Pacífico,
se crea con el objetivo de construir un área de integración profunda para
favorecer el libre comercio, impulsar el crecimiento y desarrollo de las
economías, y convertirse en una plataforma de articulación política. En tal
sentido, Chile, México, Perú y Colombia, acordaron aunar esfuerzos para impulsar
la cooperación internacional para el desarrollo. (Acuerdo Marco Alianza del
Pacífico, 2012, art. 3)
La
Alianza del Pacifico es un proceso de integración latinoamericana, dirigido a
fomentar el regionalismo abierto, es decir, que basa sus relaciones,
especialmente las comerciales, en los tratados de libre comercio que cada uno
de los Estados miembros ha celebrado de manera bilateral, regional y
multilateral. Igualmente, se caracteriza por ser un proceso de integración
profunda, en la medida en que no limita sus relaciones al ámbito económico,
sino que plantea dentro de sus retos la integración social, cultural y
política.
Adicionalmente,
la Alianza del Pacífico presenta unos ambiciosos objetivos en la región, y
frente a la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se viene convirtiendo en un socio comercial de trascendencia
para América Latina y el Caribe. Esto se plasma en el Acuerdo Marco, en el
sentido de confirmar “la voluntad de constituir la Alianza del Pacífico como un
espacio de concertación y convergencia, así como un mecanismo de diálogo
político y de proyección hacia la región de Asia Pacifico”. (Acuerdo
Marco Alianza del Pacífico, 2012, Preámbulo)
Desde
el 24 de abril de 2011, fecha en la que se constituye el proceso de
integración, hasta la entrada en vigencia del Acuerdo Marco, en el año 2015, se
realizaron diez cumbres entre los Estados parte, algunas de ellas con
participación de países observadores. En ellas se realizaron rondas de
negociación para formalizar el tratado, con la intención de liberalizar el comercio
de bienes, servicios y capitales, aunque no se ha restringido a ello, por
ejemplo:
En la Cumbre de Mérida 2012 se ratifica
la suscripción de acuerdos para priorizar temas como el medio ambiente, el
desarrollo científico tecnológico, el aumento de la competitividad del sector
empresarial, la promoción de la inversión extranjera, y la movilidad de personas,
entre otros. (Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, citado
por Beltrán & Ferrer 2016, p. 86).
A
pesar de los esfuerzos por constituir la Alianza del Pacífico, una de las
principales críticas que se le formulan es que al tratarse de países con similares ventajas comparativas,
son rivales entre sí y no economías complementarias. Tanto Colombia como
México, Chile y Perú son países subdesarrollados que dedican su actividad
comercial principalmente a los sectores primarios (agricultura y minería), e
importan, en su mayoría, productos de manufactura.
Lo
anterior da cuenta de la convergencia entre dos teorías acerca de los acuerdos
de integración: por un lado, la de los liberales clásicos, para quienes “el
libre comercio es fundamental para promover el desarrollo económico y el
progreso de todas las naciones”, a través de las teorías de la ventaja
comparada; y por otro, las teorías de la dependencia, que “promueven
exclusivamente la integración regional y entre países del Tercer Mundo”.
(Alviar, 2015, p. 327).
El
impacto de la relación comercial entre estos países puede evidenciarse en la
balanza comercial, es decir, en el registro de la
diferencia que existe entre el total de las exportaciones menos el total de las
importaciones que se llevan a cabo en el país. Para el año 2016, de
acuerdo con los cálculos del DANE–DIAN, la balanza comercial de Colombia en
millones de dólares FOB, con respecto a los demás miembros de la Alianza del
Pacifico fue la siguiente: en relación con Perú fue de 239,2 y en comparación con
Chile y México, fue de -15,0 y -2.361,3, respectivamente. Estas cifras dan
cuenta de una balanza comercial deficitaria para Colombia frente a los últimos países.
Finalmente,
aunque un proceso de integración económica es a largo plazo, puede advertirse
que por las características de los Estados parte de la Alianza del Pacífico: “la
rivalidad de las economías, más allá de su complementariedad, supone una dificultad
para mejorar los indicadores de comercio intraindustrial y, por ende, del
comercio intrarregional; sin embargo, su meta de penetrar el mercado de Asia-Pacífico
puede lograr atraer iniciativas que promuevan un encadenamiento productivo
regional” (Hernández & Muñoz, 2015, p.115).
REFERENCIAS
Alianza del Pacifico. (6 de junio de 2012). Acuerdo
Marco Alianza del Pacífico suscrito en Paranal, Antofagasta, República de
Chile. Recuperado de: https://alianzapacifico.net/?wpdmdl=4464
Alviar García, H. (2015). El TLC con los Estados
Unidos: Redefiniendo los límites del debate. En Derecho Internacional. Poder y
límites del derecho en la sociedad global. René Uruela (Coord.) (pp. 319-342)
Bogotá: Universidad de los Andes, Facultad de Derecho, Ediciones
Uniandes.
Beltrán, L.N. & Ferrer, H.E. (2016). Alianza
Pacífico: una perspectiva geopolítica y económica. Dimensión Empresarial 14(1),
79-94. doi: http://dx.doi.org/10.15665/rde.v14i1.632
DANE. (2016). Colombia, balanza comercial según
grupos económicos y principales países.
Hernández, J. & Muñoz, L. (2015). Comercio y
evolución de la Alianza del Pacífico. Equidad y Desarrollo, (24), 97-188.
doi: https://doi.org/10.19052/ed.3682
Rojas, D., & Terán, J. M. (2016). La Alianza
del Pacífico: nueva muestra del regionalismo en América Latina. OASIS -
Observatorio de Análisis de los Sistemas Internacionales, (24), 69-88.
doi:10.18601/16577558.n24.05
* Estudiante del curso de Derecho Económico Internacional de la
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de Antioquia.
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